Racing hizo valer su juego en La Bombonera y se consolidó como el gran finalista del Torneo Clausura . Con un gol de Maravilla Martínez, los dirigidos por Gustavo Costas se impusieron por 1 a 0 y aseguraron su boleto a la definición que se jugará el próximo sábado en Santiago del Estero. El rivall de los académicos saldrá del ganador entre Estudiantes y Gimnasia, que se enfrentarán este lunes.
La Bombonera vivió una noche de intensidad, pero el sueño de Boca se desvaneció frente a un rival bien plantado 🎯. A pesar de la localía, los xeneizes no pudieron revertir la situación y quedaron eliminados del torneo, dejando a sus hinchas con el gusto amargo de una derrota que los aleja de los títulos.
La decisión que estremeció a Boca
Uno de los momentos más discutidos de la noche fue la sustitución de Exequiel Zeballos a los 25 minutos del segundo tiempo. El Changuito, figura desequilibrante del equipo, dejó de tener su impacto en el juego, y su reemplazo, Alan Velasco, no logró cambiar el rumbo del partido en los 20 minutos que estuvo en cancha. La ausencia del delantero hizo notar su peso en el ataque xeneize, especialmente en un encuentro tan cerrado.
En la conferencia de prensa posterior, Claudio Úbeda dio su versión de los hechos. «Lo que estábamos viendo con gestos es que Exequiel estaba cansado y por eso tomamos la decisión de sacarlo. Si miramos para atrás, en los tres partidos anteriores también había salido en los últimos minutos. Hizo un esfuerzo físico muy grande durante el tiempo que estuvo en campo y por eso tomamos esa decisión», explicó el entrenador. Además, añadió: «Con el ingreso de Alan busqué una característica similar en el hecho de ser derecho y jugar a pie cambiado en el sector izquierdo. Darle aire al reemplazo de Exequiel que estaba un poco cansado y que pueda sumarse a la mitad de la cancha a tener más control de juego, que era lo que pretendíamos porque el partido estaba demasiado dividido por el ida y vuelta que proponía Racing».
La respuesta del entorno de Zeballos
Las palabras de Úbeda no tardaron en generar repercusión, y desde el entorno del jugador salieron a desmentirlas. Rorro Carballo, representante de Zeballos, compartió un contundente mensaje en sus redes: «No estaba cansado… todo tocuen». Sin embargo, horas más tarde, el usuario cerró la cuenta desde la que publicó el descargo, generando más misterio alrededor de la situación.
El episodio dejó una grieta en el vestuario y encendió los debates entre la prensa deportiva. Mientras Úbeda insiste en criterios técnicos y físicos, el entorno del jugador levanta dudas sobre la motivación detrás de la decisión. La tensión entre el cuerpo técnico y el represente de una de las figuras claves de Boca queda expuesta, marcando un punto de inflexión para lo que resta de temporada.
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